Desperdicio de alimentos, cifras que alertan

AUTOR: Marcela Leal, Nutricionista (MN 1196), Máster Internacional en Tecnología de los Alimentos. Representante en Argentina de Red IESVIDAS, Investigación en Estilos de Vida Saludables. Contacto: leal.nutricion@gmail.com

Algunas cifras que podemos citar:

• Son muchas las personas que padecen hambre en el mundo y superan los 842 millones. Y las predicciones 2030 informan que se sumarán más de 200 millones, con el dato preocupante que en esta cifra no están incluidas las personas que ha sumado la pandemia de COVID-19.
• Según FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y el Desarrollo), el 30% de los alimentos que se producen se pierden o desperdician.
• Esta cifra representa aproximadamente 1.300 millones de toneladas.
• 1/4% de las calorías producidas no son consumidas por humanos.
• El 6% de las pérdidas mundiales de alimentos se dan en América Latina y el Caribe.
• En América Latina 47 millones de personas están subalimentadas.
• 2.900 calorías diarias per cápita se producen para la alimentación.
• 15% de sus alimentos disponibles es lo que se pierde o desperdicia por año.
• 225 calorías por persona por día se pierden o desperdician. Es el equivalente a un desayuno.

Las estimaciones de FAO de cuánto desechamos de los diversos grupos de alimentos informan:

• 45% de frutas y hortalizas.
• 45% de raíces y tubérculos.
• 30% de cereales.
• 30% de pescado y productos marinos.
• 20% de productos lácteos.
• 20% de carne vacuna.

La magnitud del problema en Estados Unidos se caracteriza por los siguientes números:

• 72 mil millones de libras (*) de residuos de alimentos corresponden a la pérdida anual en todos los puntos del ciclo de producción antes, incluso, de llegar a los hogares de los consumidores. Al excluir los desechos generados en el hogar, tenemos 52 mil millones de libras de alimentos de fabricantes, supermercados y restaurantes cuyo destino final son los vertederos. 20 mil millones de libras de frutas y verduras se desechan en las granjas o se dejan en los campos.
• El 40% de los alimentos en Estados Unidos está sin comer. Lo cual significa que se desechan 400 libras de comida por persona por año. Incluimos en esta cifra alimentos sanos y comestibles.
• El impacto económico del exceso de los alimentos que terminan en los vertederos corresponde a 218 mil millones de dólares. 
• El 21% del volumen del relleno tiene su origen en el residuo de los alimentos.
• 21% de agua dulce la utilizamos para producir alimentos que terminan desperdiciándose.
• 1 de cada 8 personas padece inseguridad alimentaria.

Específicamente en la Ciudad de Nueva York podemos mencionar:

• El 18% de todos los residuos son de alimentos.
• Anualmente, aproximadamente 3,9 millones de toneladas de alimentos desperdiciados terminan en vertederos, lo cual representa una gran contribución a la producción de gas metano.
• 12,8% de los habitantes de esta ciudad padece inseguridad alimentaria.
• 250.000 toneladas de alimentos desperdiciados tienen su origen en áreas como supermercados, restaurantes, universidades, hospitales. Esta cifra podría disminuir con adecuadas políticas de rescate.
• 120.000 toneladas métricas de dióxido de carbono, de acuerdo al DEC (Departamento de Conservación Ambiental del Estado de Nueva York), sería la reducción anual si los restos de comida se desvían de los vertederos.
• Si se rescatara o donara el 5% a instituciones como los bancos de alimentos tendrían un incremento del 20% de alimentos disponibles para ser destinados a las personas que, estando en situación de inseguridad alimentaria, los necesitan.
• 2 toneladas de residuos de alimentos son generados por semana. Los principales generadores de desperdicios alimentarios son restaurantes, hoteles, universidades, supermercados y centros de eventos.
• El 68% de todos los alimentos desechados eran aún comestibles. Cifra que resulta de un informe realizado por el Consejo de Defensa de los Recursos Naturales (NRDC) cuyo objetivo fue la evaluación de la cantidad de alimentos desperdiciados en las ciudades de Denver, Nashville y Nueva York. Se cuantificaron la comida descartada en el sector residencial, la variedad de alimentos que terminaban en la basura, se  tiraban por el desagüe, se transformaban en abono o se destinaban para alimentar a las mascotas. Luego de realizar este análisis, concluyeron que el 68% de todos los alimentos desechados todavía eran comestibles. Solamente en la Ciudad de Nueva York el 54% del desecho alimentario correspondía a entornos residenciales, y el 20% fueron atribuidos a restaurantes y empresas de catering.
• 8.4 libras por hogar por semana.
• 2.000 camiones del gobierno municipal y 4.000 camiones privados son los destinados para recolectar las 14 millones de toneladas de desechos y materiales reciclables de hogares, comercios, escuelas, calles y sitios de construcción.
• Se gastan aproximadamente mil millones de dólares anuales para manejar todos los desechos sólidos.

Estas cifras son muy elocuentes y descriptivas de esta problemática relacionada con las pérdidas y los desperdicios de los alimentos. Podemos CONCIENTIZAR a la comunidad para que se comporten como ciudadanos responsables y también generar proyectos y acciones en Áreas de Sustentabilidad de las diferentes empresas en su estrategia de RSE. La presentación de estos números pueden ayudarnos a lograr el impacto que genera el desperdicio de alimentos.

(*) 1 libra es el equivalente a 453 gramos.