Por:&nbsp;Andr&eacute;s Pascual. AINIA (Espa&ntilde;a) Los alimentos reciclados utilizan ingredientes que de otro modo no se habr&iacute;an destinado al consumo humano. Te contamos algunos ejemplos de &quot;Food Upycling a nivel internacional y el potencial que tiene para las empresas de alimentaci&oacute;n. Ejemplos de &quot;Food Upcycling&quot; a nivel internacional&nbsp; La start-up murciana Agrosingularity es un buen ejemplo de empresa especializada en &ldquo;food upcyling&rdquo; ya que convierte los excedentes de frutas y verduras de cooperativas y empresas hortofrut&iacute;colas en ingredientes alimenticios en polvo para las industrias alimentarias. Sus ingredientes reciclados aportan una o varias caracter&iacute;sticas como sabor, color, textura, fibra, conservantes, entre otras para los alimentos que se formulan con ellos. Otros ejemplos a nivel internacional son la empresa canadiense Outcast con un planteamiento similar empleando fruta y verdura &ldquo;fea&rdquo; que no cumple los est&aacute;ndares comerciales. La asociaci&oacute;n &ldquo;Upcycled Food Association&rdquo; en Estados Unidos, con ya m&aacute;s de 100 miembros, apuesta por estos modelos de negocio y por una sociedad basada en la econom&iacute;a circular con consumidores que evitan el desperdicio alimentario a trav&eacute;s de los productos que compran. Las empresas de reciclaje de alimentos tienen la oportunidad aprovechar la popularidad de los alimentos de origen vegetal o &ldquo;plant-based&rdquo; y los &eacute;xitos de muchas empresas emergentes en este espacio con las que comparten muchos valores. Adem&aacute;s del origen vegetal y &ldquo;natural&rdquo;, la trazabilidad de sus productos a trav&eacute;s de cadenas de suministro verificables y un c&aacute;lculo riguroso de la reducci&oacute;n de emisiones y ahorro de recursos que implica su consumo a&ntilde;aden atractivo a la propuesta de valor. Compartiendo el objetivo de mejorar la sostenibilidad alimentaria se encuentran, adem&aacute;s de las empresas plant-based,&nbsp;las industrias que est&aacute;n apostando por la adquisici&oacute;n de estos ingredientes o incluso produci&eacute;ndolos con sus propios subproductos para autoconsumo. Un ejemplo es Nestl&eacute;, que present&oacute; hace un par de a&ntilde;os una nueva formulaci&oacute;n de chocolate que reemplaza el az&uacute;car refinado por pulpa de cacao, subproducto no empleado para uso alimentario. <p style="text-align: center;"> El potencial del &quot;food upcycling&quot; para rescatar alimentos es enorme. Las p&eacute;rdidas y el desperdicio de frutas y verduras de la UE a lo largo de la cadena de suministro ascienden a casi 60 millones de toneladas al a&ntilde;o y suponen el 46% del conjunto del food waste en la UE, siendo el grupo mayoritario entre los diferentes grupos alimentarios. El 6% de las emisiones de gases de efecto invernadero de origen humano provienen de la p&eacute;rdida y el desperdicio de alimentos, por lo que reducir el desperdicio de alimentos se considera una de las pol&iacute;ticas m&aacute;s eficaces para el cambio clim&aacute;tico. El reciclaje de alimentos se encuentra en sus primeras etapas, pero a medida que la sociedad se vuelve m&aacute;s sensible a la problem&aacute;tica de la sostenibilidad de la producci&oacute;n y consumo alimentaria, m&aacute;s marcas y empresas de alimentos incorporar&aacute;n el reciclaje. &nbsp; &nbsp;