Autor: Nerea Talavera, AINIA (Espa&ntilde;a) Poder degustar un buen filete de ternera o una hamburguesa, sabiendo que se ha manufacturado y obtenido sin tener que recurrir a ning&uacute;n animal, de forma sostenible y con todo el sabor que se espera degustar ya es una realidad a escala de laboratorio. En este art&iacute;culo os contamos los cuatro retos tecnol&oacute;gicos a los que se enfrenta el sector para que la carne obtenida a escala de laboratorio se transforme en un proceso industrial. La carne cultivada tambi&eacute;n llamada carne in vitro es una forma innovadora de sintetizar carne a partir de muestras de tejidos animales. Implica usar una muestra de c&eacute;lulas para cultivar el tejido deseado en un ambiente controlado, haciendo uso de las t&eacute;cnicas de biotecnolog&iacute;a desarrolladas originalmente para la investigaci&oacute;n m&eacute;dica y la ingenier&iacute;a tisular (o de tejidos). El producto a obtener es carne animal genuina. Dicha carne proviene del cultivo directo de c&eacute;lulas animales. En cuanto a los tipos celulares, la carne que se quiere obtener en laboratorio est&aacute; compuesta mayormente por m&uacute;sculo esquel&eacute;tico que contiene aproximadamente 90% de fibras musculares y 10% de tejido conectivo y graso (siendo un 0,3% aproximadamente sangre). <p style="text-align: center;"> &iquest;Existe la carne in vitro ya en el mercado? &iexcl;Si! La investigaci&oacute;n aplicada a la obtenci&oacute;n de la carne in vitro fue aprobada por la FDA en 1995, cuando comenzaron los experimentos con el objetivo de alimentar a los astronautas en sus viajes en el espacio. La primera forma comestible fue producida por el NSR/Touro Applied BioScience Research Consortium en 2000 con c&eacute;lulas de carpa dorada cultivadas para parecerse a filetes de pescado en el que se intentaba tener un sistema de producci&oacute;n de prote&iacute;na muscular in vitro. Posteriormente, en 2013, se hizo la primera hamburguesa in vitro con una inversi&oacute;n de m&aacute;s de 300.000 d&oacute;lares por el alto coste de productos y compuestos utilizados normalmente aplicados en la ciencia m&eacute;dica en el campo de investigaci&oacute;n. Mayor demanda de prote&iacute;nas a nivel global Seg&uacute;n cifras del Fondo de Poblaci&oacute;n de las Naciones Unidas (UNFPA), se espera que la actual poblaci&oacute;n mundial de 7.700 millones de personas aumente a 10.000 millones en 2050. Adem&aacute;s de dar lugar a una mayor demanda de alimentos, tambi&eacute;n originar&aacute; cambios en el tipo de alimentos demandado, y su contribuci&oacute;n relativa a las dietas, generando una mayor demanda de prote&iacute;nas a nivel global. Teniendo en cuenta que mayoritariamente proceden de productos de origen animal, esto supondr&aacute; un aumento en el consumo de productos c&aacute;rnicos de un 40% en los pr&oacute;ximos 20 a&ntilde;os. Esta mayor demanda plantea la necesidad de asegurar la sostenibilidad en la gesti&oacute;n de este recurso mediante procesos m&aacute;s eficientes y la utilizaci&oacute;n de nuevas fuentes proteicas para el desarrollo de una econom&iacute;a m&aacute;s competitiva, sostenible e integradora (estrategia europea 2020). SMARTMEAT: De escala de laboratorio a proceso industrial En este marco, desde AINIA, a trav&eacute;s del proyecto SMARTMEAT, iniciamos el camino hacia el lanzamiento de nuevos productos que satisfagan las necesidades de los consumidores mediante la incorporaci&oacute;n de alimentos saludables y sostenibles en el repertorio c&aacute;rnico de la dieta. Hoy en d&iacute;a, existen cuatro retos tecnol&oacute;gicos para que la carne obtenida a escala de laboratorio se transforme en un proceso industrial: Optimizar la obtenci&oacute;n de las c&eacute;lulas aptas para la obtenci&oacute;n de carne in vitro. Hoy en d&iacute;a en el mercado se puede optar por l&iacute;neas celulares inmortalizadas o directamente obtenidas de animales (respetando los c&oacute;digos morales). Optimizar andamiajes, muchas c&eacute;lulas necesitan una estructura sobre la que &ldquo;acoplarse&rdquo; para poner diferenciarse y expresar las caracter&iacute;sticas necesarias que las har&aacute;n aptas para el consumo. Reducir los costes del medio de cultivo. Los medios de cultivo tradiciones pueden ser de gran ayuda, pero tambi&eacute;n existen opciones para usar basados en prote&iacute;nas alternativas que resulten m&aacute;s saludables, sostenibles y de coste competitivo. Conseguir la producci&oacute;n eficiente de las estructuras celulares representativas. Tal y como se ha mencionado anteriormente, la obtenci&oacute;n de carne in vitro necesita cumplir con ciertas caracter&iacute;sticas a nivel estructural y organol&eacute;ptico. Agricultura celular para obtenci&oacute;n de carne cultivada Cabe destacar que la tecnolog&iacute;a de agricultura celular para obtenci&oacute;n de carne cultivada no pretende sustituir la carne tradicional, sino que se postula como una alternativa sostenible y saludable que puede complementar la actual cadena de valor, aliviando por un lado la presi&oacute;n existente en las explotaciones ganaderas por alcanzar las cuotas de producci&oacute;n necesarias para abastecer a la cadena de suministro y, a su vez, dar respuesta a necesidades del consumidor no cubiertas por la industria c&aacute;rnica tradicional. A trav&eacute;s del proyecto SMARTMEAT, vamos a profundizar en el conocimiento de las principales tecnolog&iacute;as necesarias para conseguir la producci&oacute;n eficiente y sostenible de carne in vitro. Esta tecnolog&iacute;a se encuentra hoy en d&iacute;a en un estado incipiente de desarrollo y, por ello, se hace necesario una profunda investigaci&oacute;n para poder solventar todas las barreras existentes de cara a una futura industrializaci&oacute;n del proceso. &nbsp; &nbsp;