Por:&nbsp;Alba Gozalbes, AINIA (Espa&ntilde;a) La previsi&oacute;n del relevante incremento de la poblaci&oacute;n mundial para 2050 evidencia un aumento proporcional en el consumo de alimentos, traduci&eacute;ndose esto en un ascenso del 40% en la demanda de productos c&aacute;rnicos en los pr&oacute;ximos 20 a&ntilde;os. Proporcionar la prote&iacute;na necesaria para casi 10 millones de personas requiere, tal y como indica la FAO, de una transformaci&oacute;n en la producci&oacute;n, procesado, comercializaci&oacute;n y consumo de los alimentos actual, de lo que toman cada vez m&aacute;s conciencia las empresas del sector. Por ello, son numerosas las iniciativas que est&aacute;n emergiendo para la obtenci&oacute;n de prote&iacute;nas alternativas y ecosistemas plant-based que las impulsen. A fin de garantizar una alimentaci&oacute;n tan nutritiva como sostenible, se buscan nuevas fuentes de prote&iacute;na que ayuden a satisfacer las necesidades de los consumidores. El auge de las prote&iacute;nas vegetales responde no solo a cuestiones de sostenibilidad, sino tambi&eacute;n a un mayor inter&eacute;s por los productos saludables y libres de ciertos al&eacute;rgenos; derivando todo ello en la adopci&oacute;n de dietas veganas, vegetarianas o flexitarianas. No obstante, es en los consumidores omn&iacute;voros donde la industria sit&uacute;a su foco, pues pretende mediante la oferta de alternativas plant based que imiten la experiencia de los productos de origen animal, guiarles hacia una reducci&oacute;n de carne o pescado en su dieta. Fuentes de prote&iacute;nas alternativas: Guisantes, garbanzos, lentejas, habas <p style="text-align:center"> La industria alimentaria dedica esfuerzos para ofrecer nuevos ingredientes, tecnolog&iacute;as y productos capaces de simular las propiedades sensoriales y tecnol&oacute;gicas de los alimentos de origen animal. Entre las fuentes proteicas vegetales m&aacute;s empleadas con este objetivo, destaca la soja. Sin embargo, debido a los problemas de alergenicidad, se indaga cada vez m&aacute;s en otras fuentes de prote&iacute;nas alternativas como es por ejemplo el guisante, cuyo uso tambi&eacute;n est&aacute; muy extendido actualmente; el garbanzo, la lenteja, el haba, entre otras. Hoy en d&iacute;a, son muchas las prote&iacute;nas contempladas como potenciales ingredientes para el desarrollo de an&aacute;logos c&aacute;rnicos y de pescado y poco el conocimiento sobre su comportamiento dentro de las distintas matrices alimentarias, los procesos involucrados y las interacciones entre sus distintos componentes. Un aspecto clave para el crecimiento de estos sectores plant based es llegar a conocer no s&oacute;lo las propiedades nutricionales de dichos ingredientes vegetales sino tambi&eacute;n sus propiedades tecnol&oacute;gicas y funcionales.